¿Tu empresa está preparada para gestionar su talento vía remota?
Lo que necesitas para la nueva etapa
En México, solamente 2 de cada 10 empresas están preparadas hoy en día para que sus trabajadores realicen trabajo remoto, a pesar de haber sido aprobado y regulado en la Ley Federal de Trabajo en Junio de 2019.
Con la situación actual que está viviendo el país con la contingencia del COVID-19, muchos centros de trabajo están enviando a sus colaboradores a laborar de forma remota para permitir el aislamiento social y evitar la contaminación de este virus.
Por lo que es un reto actual para los departamentos de Recursos Humanos implementar prácticas que permitan flexibilizar sus procesos de Talento, desde el punto de reclutamiento, onboarding hasta el día a día de sus colaboradores para realizar trabajo de forma remota. A continuación te presentamos grandes pilares para hacer frente a este reto.
Proporcionar transparencia y un espacio seguro.
La comunicación empresa – empleado debe ser directa y honesta creando un espacio seguro para que todos los empleados hagan preguntas y admitan si no saben cómo usar una determinada tecnología.
Se requiere además transparencia en cuanto a establecer horas de trabajo, parámetros de uso de Internet y objetivos para completar tareas.
Contar con un objetivo y una meta clara
Como menciona Anita Williams Woolley, profesora de la Universidad Carnegie Mellon, para permitir un trabajo colaborativo productivo “será importante que todos entiendan y tengan las mismas metas y objetivos”. También es importante identificar los implicados en cada proceso permitiendo definir que trabajo debe realizarse en equipo, qué se puede dividir y que completar de manera independiente.
Elegir herramientas y canales digitales fáciles de usar.
Al necesitar comenzar este proceso de trabajo remoto de forma rápida, es importante reducir la curva de aprendizaje lo más posible, por lo que es importante identificar las herramientas remotas fáciles de utilizar como Hangouts de Google, Skype y Zoom.
Recursos Humanos debe de estar cercano al departamento de TI, permitiendo que la información sea siempre accesible, contar con guías de uso de las herramientas y preguntas frecuentes para que los colaboradores puedan buscar información por su cuenta.
Contar con un liderazgo de inteligencia social.
Según un estudio de 2019 realizado por Harvard Business Review, las empresas que hacen hincapié en la inteligencia emocional informan niveles más altos de productividad y una mejor participación de los empleados que las que no lo hacen.
Dar seguimiento y liderar a un equipo remoto requiere de un líder con un alto nivel de inteligencia social y fuertes habilidades de colaboración que pueda construir relaciones; percibir, evaluar y responder a sus emociones y las de los demás.
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